El rascacielos funciona con energía solar, agua de mar y desechos plásticos. Produce energía limpia, recicla plástico y devuelve al mar agua descontaminada.
La contaminación que provoca el plástico en el mar es mucho más grave de lo que te puedes imaginar. Millones de toneladas de basura van a dar al mar cada año, gran parte de ella es plástico que no sólo se amontona en el lecho marino, sino que se descompone fragmentándose en pequeñas partículas que los peces pueden ingerir creando una cadena de daños en los siguientes organismos en la cadena alimenticia.
La contaminación que provoca el plástico en el mar es mucho más grave de lo que te puedes imaginar. Millones de toneladas de basura van a dar al mar cada año, gran parte de ella es plástico que no sólo se amontona en el lecho marino, sino que se descompone fragmentándose en pequeñas partículas que los peces pueden ingerir creando una cadena de daños en los siguientes organismos en la cadena alimenticia.
Para eliminar asentamientos de basura tan grandes como la Gran mancha de basura del Pacífico, también conocida como “sopa de plástico”, que se estima es dos veces el tamaño de Texas, se necesita una solución de la misma magnitud. Así fue como surgió la idea de Seawer, el primer rascacielos flotante.
Seawer fue diseñado por el coreano Sung Jin Cho como una propuesta para el 2014 eVolo Skyscraper Competition, en el que por cierto recibió una mención honorífica. El proyecto consiste en una estación hidroeléctrica sustentable que funciona con energía proveniente de sol, del agua de mar y los desechos plásticos que filtra del agua.
Su principal tarea es trasladarse por el océano limpiando el agua de basura plástica a la vez que genera energía eléctrica limpia. La estructura del Seawer consta de 5 capas de filtros similares a las barbas de ballenas que separan el agua de las partículas plásticas.
Los residuos plásticos se conducen a una planta de reciclaje en el mismo edificio mientras que el agua purificada se acumula en un tanque de sedimentación para ser liberada nuevamente al océano. El proyecto incluye una hueco de drenaje de 550 metros de diámetro y 300 de profundidad que se localizaría en el centro de la sopa de plástico.
Aunque no mencionan cuál sería el tratamiento que daría el Seawer a las pequeñas especies que puedan vivir en los alrededores de estos depósitos de basura, de construirse este rascacielos, estaríamos dando un gran paso para recuperar nuestros océanos.
- Fuente: Erbol
No hay comentarios.:
Publicar un comentario